Reseña Mierda en mis zapatillas - Lorena Pacheco

MIERDA EN MIS ZAPATILLAS - LORENA PACHECO

Páginas: 478

Publicación: 23/03/2017

Colección: Escarlata Ediciones

Sinopsis: La oveja negra ha vuelto a casa, y sus zapatillas aún tienen mucha mierda que pisar. Cuatro años atrás, Hanna se fugó con un hombre mayor. Ahora regresa con el orgullo herido y la intención de retomar las riendas de su vida. No será fácil. El rechazo de su hermano, la actitud prejuiciosa de los lugareños, y sus propias inseguridades, le harán la vida imposible, incluso cuando un nuevo amor llame a su puerta. Dependerá de ella ganarse el perdón que añora y lograr reconectar con su pasado. Por suerte, cuenta con la ayuda de Raquel, la novia de Burke, y la mejor terapeuta del pueblo: la vaca Matilda.

Opinión Personal: 

Después de irse sin decir nada a nadie, Hanna ha vuelto a su pueblo. No es algo que le haga demasiada ilusión, ya que la forma de irse no fue la adecuada y ya han pasado cuatro años, pero siente que debía volver allí. El momento de reencontrarse con toda su gente no será fácil, sobre todo cuando se tenga que enfrentar a su hermano Burke. Pero también contará con la ayuda de unas personas que no esperaba, sobre todo por parte de Raquel, la novia de su hermano, que la ayudará en todo lo que pueda y hará que Hanna se replanteé muchas cosas sobre su futuro.

Con la anterior reseña que hice hace poco sobre un libro de Lorena Pacheco, la autora de este libro, ya dije que cada libro suyo era una apuesta segura y cuando me enteré que sacaba nuevo libro y que era la segunda parte de Mierda en mis tacones, me llevé una gran alegría, ya que el anterior, es mi favorito de la autora. Y como os decía, ha sido una apuesta segura. De hecho, hacía tiempo que no me leía un libro tan rápidamente, ya que lo empecé el jueves por la mañana y el sábado lo retomé y no paré hasta terminarlo. Además, la aparición de muchos personajes que aparecen en el primer libro, hizo que aun disfrutara más de la lectura. Sin duda, Lorena está dentro de mi lista de autores favoritos.

El libro empieza años antes de la actualidad, donde conocemos a una niña llamada Hanna. Esta ya se siente la oveja negra del pueblo, porque se ve diferente al resto de las niñas de su edad, pero tiene un gran apoyo, su hermano Burke, que siempre está para ella. Varios años después, y después de estar cuatro años lejos de su hogar, Hanna vuelve, sintiéndose aun esa oveja negra como cuando era pequeña. Lo ha pasado bastante mal y sabe que su vuelta no va a ser nada fácil, tal y como se lo demostrará la reacción de su hermano. Pero poco a poco se irá dando cuenta que quizá volver era lo correcto.

Empezamos con uno de los puntos que me ha gustado de este libro, y es el hecho de que el libro no solo está narrado por la propia Hanna, sino que también tenemos algunos capítulos narrados por Burke. Eso nos ayuda a entender el por qué el reencuentro de los dos hermanos es un tanto difícil y como se sienten los dos ante ese reencuentro.

Otra cosa que me ha gustado mucho son los personajes en sí. Como decía antes, muchos de ellos ya aparecieron en el primer libro, con lo que me encantó reencontrarme con ellos, sobre todo con uno de ellos, que es el que más me hace reír, pero es que además, para mí, han evolucionado con lo que aun me han gustado más que en el primer libro y eso era algo muy difícil porque no pensaba que se les podía coger más cariño del que ya les tenía. Además, aparece Hanna, la gran protagonista de esta historia, su mejor amiga Emma y otros personajes, con los que es imposible no encariñarte con ellos desde el primer momento en el que aparecen.

Hanna me gustó en cuanto empecé el libro. Es una chica que siempre se ha sentido fuera de lugar en su pueblo pero que en cuanto la conoces te conquista. Es verdad que ha hecho algunas cosas mal, lo cual reconoce, pero nadie es perfecto y en mayor o menor medida, todos cometemos errores, ya que nadie es perfecto. La verdad es que me ha gustado mucho su forma de ser, y como protagonista me ha parecido perfecta.

También conocemos a Kai y Axel, dos gemelos que trabajan en las reformas del hotel de Raquel y Burke. Los dos me han gustado muchísimo, Axel ha conseguido sacarme más de una sonrisa, pero si tengo que elegir solo a uno, sin duda me quedo con Kai, ya que en cuanto apareció en el libro me conquistó y tiene momentos que me han parecido muy bonitos.

Y de los personajes que repiten en este segundo libro no hace falta que os diga nada, simplemente que si habéis leído el primero, os llevaréis una alegría al volver a reencontraros con muchos de ellos.

Como no, nos vamos a encontrar con una historia de amor, la cual me ha gustado mucho ya que no es algo que pase de forma rápida, sino que sucede de forma pausada, dejando momentos muy bonitos. La verdad es que la forma que tiene Lorena de narrar algunas escenas me gusta mucho, ya que te deja con una sonrisa en la boca.

Pero en ese sentido, lo que más me ha gustado es que no solo se centra en una historia de amor, sino que también nos encontramos con unas historias de amistad y familiares descritas de forma excepcional, dándoles también la importancia que realmente tienen.

Cuando leí Mierda en mis tacones me reí muchísimo, creo que es de los libros con el que más lo he hecho y aunque con este libro también me he reído mucho (hay momentos en los que solté más de una carcajada), lo he visto un poco más serio que el anterior. No es algo que me haya molestado, ya que era algo necesario en este libro y en el personaje de Hanna, así que ese toque más serio mezclado con los momentos divertidos, ha sido un detalle que me ha gustado muchísimo.

La forma que tiene la autora de narrar las cosas, hace que los que estamos leyendo nos metamos de lleno en la historia, haciendo de esta la nuestra propia, ya que vamos sintiendo todo lo que sienten los personajes y nos emocionamos junto a ellos, ya que es imposible no hacerlo. Esto hace que consigamos congeniar en todo momento con los personajes y que los queramos con sus cosas buenas y malas.

El final me ha encantado. Hacía tiempo que no decía algo tan rotundo de un libro pero ha sido así, en el último capítulo y el epílogo, Lorena ha conseguido que me riera muchísimo, pero también emocionarme hasta caerme alguna lagrimita y es que no solo el final, la historia es de esas que recuerdas con una gran sonrisa y con mucho cariño.

Por supuesto, se lleva la nota máxima, no podía darle otra y si aun no habéis leído esta historia o a la autora os digo que dejéis el libro que tengáis en vuestras manos y os pongáis ya con las historias de Lorena, os aseguro que no os arrepentiréis.

5 sobre 5

Lo recomendaría? Por supuesto que sí, nunca me cansaré de recomendar los libros de Lorena, la cual, como he dicho, es una de mis autoras favoritas.